A partir del 1 de enero de 2026, las plataformas digitales deberán retener impuestos a las empresas que vendan productos a través de ellas.
Quienes reciban pagos en el extranjero o no proporcionen RFC enfrentarán una retención del 36%, mientras que quienes cobren en México y sí proporcionen RFC tendrán una retención del 10.5%.
Si tu empresa extranjera vende en México mediante plataformas tecnológicas, constituir una entidad mexicana puede ayudarte a optimizar estas retenciones.